Prisa por criminalizar a los jóvenes de Malpaso

 

➡️Insidia

➡️Prisa

➡️Desmontar versiones

➡️Cuentas alegres

➡️Verdad histórica 

De salida 

➡️Herencia maldita

Por Norma Galarza 

Insidia.- “Sí quiero hacer un comentario y una precisión.  Que el día 27 se rescatan dos jóvenes, que son los que nos dan finalmente,  la ubicación de los 7.  Ellos refieren que se encontraban con 7 jóvenes más y que el motivo de la privación ilegal de la libertad, había sido por narcomenudeo”.  Esa declaración soltó ayer Óscar Alberto Aparicio Avendaño, el subsecretario de Operación Policial de la Secretaría de Seguridad Pública. El funcionario matizó que: “será la FGJEZ la que deslinde o reafirme esta versión», empero tomó un atajo en el proceso de investigación y criminalizó a los jóvenes de Malpaso.  El funcionario estatal, tomó  la supuesta declaración de dos personas liberadas de secuestro y se brincó la investigación de la Fiscalía, para ser él el que dicte un veredicto que entrelíneas justifique la masacre de 6 jóvenes. 

Prisa.- En la conferencia de ayer, encabezada por Francisco Murillo, Rodrigo Reyes y Aparicio Avendaño, se notó la prisa que tiene la administración estatal de encontrar una fisura que lo salve del repudio popular que hoy carga.  La intención de sembrar la idea de que los privados ilegalmente de la libertad eran delincuentes, porque circulan videos y esa supuesta declaración, exhibe un entramado muy obvio y conveniente para el gobierno.   La consigna de criminalizar a las víctimas la dejó clara Comunicación Social al enviar dos veces el fragmento de la declaración con la que inició este texto. Aunque, es de reconocer que Murillo Ruiseco y Reyes Mugüerza, fueron prudentes y respetaron en todo momento, el debido proceso, la ligereza del   subsecretario de David Monreal, da qué pensar. 

Desmontar versiones.- Del encargado de Operación Policial, también llamó la atención la manera en que desmontó, en un santiamén, todas las versiones sobre los hechos de la madrugada del  24 de septiembre. Echó abajo con su relato,  no solo de la versión de las familias de las víctimas, también la de testigos. Negó tajantemente que desde la media noche haya habido disparos, tal como reportaron habitantes de esa comunidad. Pese a que los familiares insistieron al señalar que a los muchachos se los llevaron cerca de las 4:00 de la mañana, el representante de Seguridad Pública relató que el 911 recibió la llamada de auxilio hasta las 5:11 de la mañana y que las fuerzas de seguridad arribaron a las 5:27. 

Cuentas alegres.- Cantinfleó al explicar la razón por la que una hipotética guardia de estatales en la Unirse, no acudió a brindar auxilio. Su objetivo era  ponderar la rapidez con la que las fuerzas de seguridad detuvieron a dos presuntos responsables del secuestro de los jóvenes. Ambos detenidos, duranguenses de 15 y 16 años cuyas fotos se expusieron pixeleadas en la conferencia mencionada.  Se presumieron otros resultados que derivaron de los operativos de su búsqueda, que dan cuenta de que en Zacatecas el crimen organizado no es una aguja en un pajar.  En resumen, la manera de salir del embrollo, es adelantando juicios para que sea la opinión pública la que condene a priori.

Verdad histórica.- La premura y la frivolidad, por ahorrarse una conclusión jurídica aumenta la desconfianza en la autoridad. A reserva de lo que arrojen las pesquisas serias, porque estoy consciente de que el escenario actual, tiene varias aristas que contemplan también una crisis muy profunda de valores, preocupa la “verdad histórica” zacatecana.  La rapidez para sacar conclusiones y supuestas confesiones de personas que en todo caso deberían ser llamadas a declarar, es realmente preocupante. Pues así las cosas. Zacatecas seguirá con la incertidumbre en este y muchos casos más. 

De salida

«Herencia maldita».- No entiendo porque insisten en ver al gobernador y escuchar su postura, si al final de cuentas lo único que tendrá que decir es que son las «herencias malditas». De hueva.

Hasta el lunes

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