Por Pablo Pedroza
“Las autocracias se caracterizan por acumular todo el poder político en una única figura, a menudo divinizada o tenida por guía incuestionable del destino de la nación. Las decisiones y acciones de un líder autocrático rara vez pueden cuestionarse, contradecirse o someterse a revisión”
Tomado de la red
29 agosto 2024
En septiembre se cumplen 18 años de que, calificadas las elecciones presidenciales, Andrés Manuel López Obrador mandó al diablo las instituciones. Enardeció entonces a sus hordas para que estas tomaran la tribuna para impedir el último informe de Vicente Fox Quezada, en actitud intransigente.
Aquello es apenas una chispa frente al Crematorio que se ve venir el próximo mes en la Cámara de diputados donde a consigna del autócrata del México de hoy, sus huestes, no sólo mandarán al diablo al poder judicial, anulando su rol constitucional, sino que, por sumisos, acabarán incinerando los presuntos logros económicos que dicen haber tenido: fortaleza del peso y confianza de los inversionistas extranjeros, todo eso de lo que ahora ya no puede alardear.
Obligando a la presidenta electa, que es quien pagará los afanes autócratas e incendiarios de su padrino, a pedir calma y mesura, pues ya son muchas las señales de los problemas que se nos vienen. Claudia debe tener claro que este proceso de incineración que se palpa, pueden cavar aún más hondo las fantasíasde la gasolina a 10 pesos y el crecimiento del 4% anual
Habrá quien con devoción, quiera vendernos que las reformas para cambiar o destrozar el Poder Judicial son parte de un proyecto progresista; pero ante el evidente nivel de rencor y revanchismo mostrado en cada Mañanera, uno no deja de ver una venganza contra todo aquello que fue freno, opinión diferente, mecanismo de contrapeso o límite a su autocrática impostura. De ahí la suerte del Poder Judicial y organismos autónomos ante los vulgares instintos de un hombre envilecido en el poder de la investidura.
Así a 210 años de la “Constitución de Apatzingan” y del “Supremo Tribunal de Justicia” (Poder Judicial), Andrés Manuel el Teócrata, nos impone (no hay contrapesos sólo pataleos) una reforma que no sólo retrocede y deteriora al Poder Judicial, en el contexto de deficientes cuerpos policiacos, fiscalías, ministerios públicos y demás que les acompañan, retraso, que de seguir Andrés Manuel en su rencorosa postura acabará dinamitando, aún más, a la voyante – obvio es sarcasmo– economía mexicana.
Así las cosas, en materia económica, puede ser que lo que fue el error de diciembre de Ernesto Zedillo, sea lo que la reforma judicial a Claudia Sheimbaun, el error de septiembre.
Recalco la preocupación por las capacidades de quienes son la puerta de entrada a la obtención de justicia en razón de que la venganza contra el Poder Judicial, disfrazada de reforma por nuestro autócrata, contiene elementos que son más bien responsabilidad de otros entes, incluso del mismo Poder Ejecutivo en manos de Andrés Manuel.
Como ejemplo una absurdo de a libra:
El artículo 20 de la reforma (página 89), señala el derecho de la persona acusada a ser juzgada antes de 4 meses si la pena no excede más de dos y antes de un año si la pena excede ese tiempo.
De no ser así deberá dar aviso inmediato al tribunal de Disciplina Judicial y justificar las razones de la demora.
Ahora bien imagínese a los nuevos, inexpertos en el arte y oficio de aplicar las leyes, lo de impartir justicia es otro asunto enfrentándose a las deficiencias y atrasos de policías investigadoras, ministerios públicos, forenses, peritos en cualesquiera de los campos. En el extremo de los cuerpos policiales en su totalidad.
Es suficiente mencionar que, hoy día, aún contamos con guardías nacionales de caminos que ni levantar una multa saben; de ahí siga con sus preocupaciones
En perspectiva, el magistrado del Poder Judicial, Arturo Nahle, ha explicado que de las causas promovidas por el ministerio público, es decir la fiscalía, 93% son condenatorias, 3% absolutorias por falta de pruebas o porque el acusado era inocente. También da un dato drámatico y que llama a la alerta en torno a la reforma, aún persiste una gran impunidad por los retrasos en los ministerios públicos que Usted encontrará en los archivos de las fiscalías. Sume a esto el 80% de los delitos que no se denuncian, ahí es donde realmente está el gran retraso en la aplicación y agilidad en la impartición de justicia, pero estamos en lo que los ojos rencoros y vengativos de López Obrador quieren ver.
En concreto, el Poder Judicial actual o reformado, seguirá sufriendo de las deficiencias de las fiscalias y demás entes integrantes del proceso de impartir justicia, para el logro de sus fines. Eso sí, todos con insuficientes recursos y capacidades que los poderes ejecutivos deben atender. Con la carga adicional de informar de porque no se cumple en el tiempo establecido el derecho de ser juzgado. Es decir informar de las ya mas que denunciadas y expuestas deficiencias de fiscalias y ministerios público.
Lastima que el aún presidente sólo tenga en su mente un país en la proporción de sus propios deshechos autocráticos. Veremos pronto si la economía moderando a Claudia, vence a Andrés Manuel, y genera las primeras tensiones de su ‘de facto’ Maximato.
Por lo pronto ese actorazo llamado Andrés, que vendió un demócrata y entregó un autocrata, tendrá un mes más para impulsar sus afanes complicando los tensos momentos del país. Salinas se lo hizo a Zedillo, Andrés se lo hará a Claudia, al final resultaron iguales.
Con Plutarco Elías Calles inició una época de generales, instituciones y pluralidad democrática, no podemos dejar de ver la reforma política de 1977
Con Andrés Manuel, concluyó la anterior etapa e inició una que aborrece los contrapesos, las instituciones y, sobre todo, la división de poderes. El mandatario es fundador de Morena, lo será también del clan los autócratas que ojalá aminoren su cleptocracia disfrazada de obras faraonicas.
Y usted ¿qué justicia espera con esta reforma? la ofrecida contra expresidentes, la del Segalmex y los miles de millones de pesos observados, la de Sinaloa, la de los hijos del presidente, o seguirá con la misma, contento de una venganza que no es suya.
Que sobre nuestra economía no lo logre…