“Si quieres derrotar la corrupción debes estar listo para enviar a la cárcel a tus amigos y familiares”.
Lee Kuan Yew, primer ministro de Singapur
Entre las ceremonias al Tlatoani y el pago de tributo a Trump, con la entrega de 29 capos; la ley anti nepotismo y la entrada en vigor del 25% de aranceles a todos los productos mexicanos, pasó de largo una nota que si bien el pueblo bueno y sabio, ya se acostumbró, no se debe dejar de lado. 51 mil millones de pesos del presupuesto federal, fueron extraviados en 2023, en el gobierno de Andrés Manuel.
Lo más grave del asunto es que de las revisiones que ha realizado la Auditoría Superior de la Federación (ASF) de las cuentas públicas hasta del 2023, suman hasta el momento 303 mil millones de pesos de los que no se tienen evidencias de su destino, es decir, no saben dónde están o en qué se gastaron.
Yo le preguntaría, estimado lector, ¿qué haría usted si cada hora le entregaran 5.9 millones de pesos, durante 5 años?, ese fue el desfalco o mal uso del dinero que ejerció el anterior gobierno.
Muchos dirán que se fue en las campañas políticas de las gubernaturas, legislaturas y presidencia del 24, pero allí otro problema porque las campañas políticas tienen topes de gastos y además tienen límites a los financiamientos, tanto públicos como prprivados.Entonces, si ese dinero se utilizó para ganar elecciones fueron triunfos robados y mal habidos, es decir fuera de la ley.
En el estudio publicado por Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, de título “los hallazgos de la ASF”, da cuenta de las instituciones públicas con más opacidad en el ejercicio público de los recursos, y como podría vislumbrar, quién tiene mas millones qué aclarar, es la dependencia favorita del régimen: Defensa Nacional, seguido por la Marina y Hacienda, lo que demuestra que hasta los honestos generales sucumbieron a la opacidad por andar de empleados outsourcing del gobierno de López.
¿Recuerda que se nos prometió una salud como la de Dinamarca, pero que está más colapsada que el transporte público en hora de entrada a la escuela o DinamarcaaPues la Secretaría de Salud tuvo 1 mil 257 millones de pesos usados irregularmente, lo que quiere decir que sí le invirtieron, pero no se supo en que lo ejercieron. Espero se acuerde cuando llegue al hospital y no tenga medicinas o no alcance cita en la unifila o vea a los pseudo médicos cubanos dar recetas con aires de socialismo castrista.
López Obrador se comprometió con que creceríamos del 4 al 6 % al año, pero nada más alejado de la realidad, no crecimos en seis años, pero no todo tiene que ver la pandemia, si se analizan los gastos en áreas como Turismo o Pemex, que son dos polos de desarrollo, pero con cuentas pendientes de aclarar por casi 5 mil millones juntos, como si se hicieran dos segundos pisos de David Monreal (sí, con moches incluidos).
Por último, los estados más opacos e irregulares son el Estado de México, que es la caja chica de los gastos para el régimen de Cuarta y Tabasco, ahora se puede entender el poder político y económico de algunos políticos de esa tierra.
Sin duda el sexenio que acaba de terminar, nos deja lecciones que nos deben llamar la atención: la primera es, que no por repetir que se es honesto y valiente lo serás, a menos que lo compruebes con cuentas claras; dos, que el estar ondeando un pañuelo blanco en señal de terminar la corrupción es un show mediático, no una realidad; y tres, que la austeridad republicana solo aplica a la sociedad o pueblo bueno, pero para los que vivían bajo la protección del presidente había abundancia descarada.
Es momento de que nos quitemos las lagañas o velos que tenemos en los ojos, dejemos de creer en los 200 pesos de la cartera del bienestar y exijamos cuentas claras y transparentes, le preguntaría estimado lector ¿Qué haría si en este momento le descontaran el 50% de su salario para cubrir el hoyo que dejó la anterior administración?
