Desconfianza

Por sus frutos los conoceréis

Mateo 7: 15-20

➡️Visceral

➡️Amnesia

➡️Las opciones del ISSSTEZAC

De Salida 

➡️La criba legislativa

➡️Se desmorona el poder de Rubén Ibarra en la UAZ

Visceral.- Vaya reacción de David Monreal al ser interrogado sobre las declaraciones del domingo de Sigifredo Noriega Barceló, respecto al caso de Julio César “N”. Su contestación fue tan visceral, que nada más le faltó decir  ¿Y Loret? o el clásico “el PRI robó más”, para tratar de desviar la atención.  En su conferencia semanal, el líder de la Iglesia católica, afirmó que impacta a la sociedad que autoridades se encuentren presuntamente involucradas en el homicidio de Raúl Calderón Samaniego.  Aseguró que eso abona a la desconfianza de la ciudadanía.   La reacción del que cree que gobierna no tuvo desperdicio,  ya que trató de enmendar la plana. Monreal Ávila defendió a su ex delfín al acotar que la desconfianza de la que habla el obispo, es hacia las instituciones “no precisamente a la clase política”. Y no omitió darle un raspón al catolicismo al recordarle al ministro religioso los escándalos de abuso sexual a menores. 

Amnesia.- El mandatario quiso sacarse la espina y despotricó, sin tomar en cuenta que si bien la institución es cuestionable, su administración se ha ganado la desconfianza a pulso.  En ese tenor, poco le conviene ponerse al tú por tú con Noriega Barceló.  Defender a los presuntos involucrados en un homicidio, es absurdo cuando hay una persona de mayor cercanía involucrada en otra muerte ¿O ya se le olvidó Jorge Iván? Aunque es difícil señalar el nivel de responsabilidad de uno de sus vástagos en la golpiza cuyas complicaciones causaron el deceso meses después del estudiante,   no le conviene escupir para arriba.  Aún puede revivir el reclamo contra su gobierno porque hasta hoy,  el joven no ha tenido justicia.  

Las opciones del Issstezac.- Quienes tampoco han tenido justicia son los agremiados del ISSSTEZAC. Y es que, en los albores de la nueva gobernanza, un rubro dejó ver de cuerpo completo, lo que vendría.  Antes de la toma de protesta, el tesón de Alejandro Tello para que diputados aprobaran la reforma al ISSSTEZAC develó sus intenciones de plancharle el terreno al nuevo gobierno.  Esa insólita cruzada, dejó al descubierto un acuerdo entre las élites para garantizar protección a la clase política que sirvió como receptáculo de toda suerte de acusaciones en la campaña electoral.  La necedad de imponer una reforma regresiva, marcó el inicio de esta administración.  Con ello, se hizo agua la promesa de acabar con la corrupción, lo que provocó que la sociedad zacatecana perdiera la confianza en el actual gobierno. Suman casi dos años de gestión,  y no ha caído uno solo de los que acusaron de saqueadores del instituto.  El problema fue que antes de iniciar investigaciones sobre una de las causas de la quiebra, se intentó cargar a trabajadores, jubilados y pensionados los pecados ajenos. 

Deuda al SAT I.- Pero ahí no acaban las taras que hunden al ISSSTEZAC. La conferencia pasada de Ignacio Sánchez,  fue antesala para destapar otro pendiente en el instituto atribuible a los malos manejos de pasadas administraciones. Resulta que carga un adeudo de más de 130 millones al SAT. Tanto Víctor Rentería como Marco Vinicio Flores no reportaron a hacienda las retenciones de ISR que hicieron a los trabajadores durante sus encargos.  Tras dos auditorías, una fiscal  y otra de recaudación, se determinó por la primera un monto a pagar de 30 millones de pesos, cubiertos luego de un acuerdo.  Empero, la auditoría de recaudación contempló un pasivo por 130 millones de pesos. La medida que usaron los ex administradores fue ampararse, sin embargo, no fue procedente.

Deuda al SAT II.- En resumen, al saqueo crónico se le sumó la ineficacia y la ineficiencia a las que en tono cantinflesco aludió Sánchez Gónzalez apenas el martes.   Por esa falta de pericia y la costumbre de olvidar que, como dijo Joe Black, de la muerte y hacienda nadie se salva, Marco Vinicio Flores Guerrero y su antecesor podrían enfrentar denuncias en la Fiscalía.  Al menos así lo infirió el actual encargado del organismo al indicar que el último titular del espacio que hoy ocupa, no enteró al SAT de las retenciones de ISR de diciembre a su partida. También dijo que producto de ello, se le retuvieron 40 millones de pesos a la Sefin de Ricardo Olivares.  Sánchez González fue enfático en que el ISSSTEZAC tiene solo dos opciones: reforma profunda o muerte.  Más allá de eso y en aras de recuperar la confianza ciudadana en el gobierno de David Monreal, se deben investigar y castigar a los autores de los malos manejos y  las omisiones.  Hay dos de ellos sobre la palestra ¿Pesará más el reclamo ciudadano o la protección a los amigos de Tello?  Al tiempo.

De Salida 

La criba legislativa.- Por cierto, la reforma profunda que según «Nachito» ya tiene diseñada, tendrá que pasar por la criba legislativa. Lo malo es que al conjunto de personajes que integran hoy la LXIV legislatura, los distingue la timoratez y será difícil que haya quien se atreva a tomar ese toro por los cuernos. Ayer demostraron que tienen miedo. En comisiones, Karla Valdés, Gabriela Basurto, María del Mar Ávila, Guadalupe Correa, María del Refugio Ávalos y Jehú Salas desecharon el dictamen de despenalización del aborto. Según ellos, porque están a favor de la vida. Sin duda no saben que con su negativa a despenalizar el aborto, no salvan ninguna vida porque los abortos siguen, al contrario, arriesgan la  de las mujeres que se practican abortos en condiciones insalubres. Una prueba más de su divorcio con las personas de carne y hueso.

Se desmorona el poder de Rubén Ibarra.- Ayer la UAZ vivió un proceso electoral histórico. Además de la transparencia en el conteo de sufragios, el Sindicato del Personal Académico de la UAZ (SPAUAZ), eligió por primera vez a una mujer para encabezar su Comité Ejecutivo.  Jenny González superó al dedazo de Rubén Ibarra que encarnó Manuel Rivera, con dos votos para darle el triunfo a la planilla roja. En la UAZ hay esperanza de que por fin el sindicato servirá a los intereses de los trabajadores y no los de rectoría ¿Será? Ya  veremos

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