La asignatura pendiente… De la sociedad

“El niño que no sea abrazado por su tribu, cuando sea adulto, quemará la aldea para poder sentir su calor”

Proverbio africano.

 

➡️Problema añejo

➡️Descomposición social 

➡️175 mil mexicanos en nóminas del CO

➡️Responsabilidad compartida 

➡️El precio de sangre

➡️La omisión social

De Salida 

¿El FAM quiere entregar el Senado?

➡️Ganar perdiendo

➡️El vengativo «Alito»

➡️¿PAN y PRD permitirán el agandalle? 

Por Norma Galarza 

Problema añejo.- La inseguridad que vivimos no surgió por generación espontánea, ni desde septiembre de 2021.  Lo tenemos bien entendido, quienes desde 2007 perdimos la libertad para salir a las calles por miedo a ser presas de la delincuencia. En Zacatecas tenemos casi cuatro lustros sin tranquilidad. El deterioro social que padecemos hoy, fue la suma de omisiones del Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial. A esa dejadez, se unió la destrucción paulatina de los núcleos familiares.  Nuestra entidad vive días aciagos por el secuestro y posterior asesinato de 6 de los 7 jóvenes de Malpaso. El atroz hecho, llama a reflexionar sobre las fallas de todos, no sólo de los gobiernos. 

Descomposición social.- Si bien, es condenable que sin tener una conclusión de las investigaciones, en el Ejecutivo se buscó criminalizar a las víctimas, no hay que perder de vista el fondo. Sería faltar a la objetividad, si dejamos de lado que no mienten ni Rodrigo Reyes ni David Monreal, cuando hablan de descomposición social como una de las causas.  Lo que ocurrió el pasado 24 de septiembre, tendrá que ser la gota que rebase el vaso de nuestra tolerancia.  Sin quitar responsabilidad a las instituciones, es prudente analizar nuestro papel como sociedad. ¿Por qué? Porque ya no queremos que ningún joven sea sacrificado por esta guerra que esconde un sinfín de aristas. 

175 mil mexicanos en nóminas del CO.- El fin de semana el secretario de gobierno fue duramente cuestionado por asegundar los dichos del gobernador, respecto a las causas de fondo de la inseguridad, aunque también insistió en que se reconoce el problema. Además afirmó  qué se le hace frente desde la Secretaría de Seguridad y a través de las políticas públicas. La última,  se basa en la idea, instaurada en 2018,  de que entregar dinero menguará la inseguridad porque la pobreza es causa de que la juventud busque trabajo con el narco, pero ¿por qué no ha funcionado?   Según una investigación de Gian María Campedelli y Alejandro Hope para la revista Science publicada en 2022, el Crimen Organizado es la quinta actividad que más genera empleos. En ese sentido, según ese estudio, se estima, que el hampa tiene al menos a 175 mil mexicanos en sus nóminas.  Entonces ¿el Estado tendría que equiparar los ingresos de los empleados del narco? Suena muy descabellado. 

Responsabilidad compartida.- Ese dato  hace que replantear ¿Qué hacemos los ciudadanos para contrarrestar la inseguridad? ¿Por qué el dinero que da el Estado no contribuye a quitarle soldados al crimen?  Las estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) hablan de reducción en homicidios dolosos.  Empero, los grupos criminales se multiplican exponencialmente. Sin minimizar el secuestro para trabajo forzado por parte de los grupos delincuenciales, no es mentira que siempre encuentran maneras de llevar más y más jóvenes a sus filas. 

El precio de sangre.- Con esa realidad ¿Cómo negar que las estructuras familiares están en franca descomposición? Y no es de ahora.   Basta revisar nuestro entorno, nuestra colonia, o comunidad, se han podrido poco a poco. Es suficiente girar la cabeza para encontrar que las adicciones han aumentado de forma paulatina y ponderada ¿Qué tendríamos que hacer los ciudadanos frente a un reto que ya trajo demasiada sangre y sufrimiento? Tomar responsabilidad. Ejercer nuestro derecho a manifestarnos, es una forma muy loable de mover a las instituciones, pero, también hay que incidir en cambios desde nuestras familias.  La ciudadanía está en una zona de confort en la que reduce todo a la politiquería, sin considerar que lo único que nos ha traído esa actitud es la agudización de nuestros problemas. Ya es tiempo de entender que la inseguridad no se va a acabar hasta que tomemos cartas  sobre nuestro entorno. Quienes nos han vendido espejitos y medran con el dolor ajeno se benefician de nuestra apatía y dejadez, en cada proceso electoral. A estas alturas, ya no hay pretextos, no son el PRI, el PAN, el PRD, o Morena la solución. Los que nos han  conformado con soluciones rápidas a un conflicto crónico, en el poder pagan con nuestros reclamos su frivolidad, pero  la sociedad paga un precio aún más alto por sus fallas: El precio de la sangre de sus hijos. 

La omisión social.- En este punto, hay que entender que todos dejamos de hacer lo que nos corresponde desde hace décadas.  No solo el Estado permitió el crecimiento y multiplicación de los cárteles, las familias dieron entrada a las drogas y son permisivas con el dinero fácil que llega a los hogares.  No podemos ser tan incongruentes como para, por un lado condenar la escalada de la violencia, y por el otro, no atender los focos rojos en nuestras casas.   Eso no quiere decir que hay que bajar la guardia con las autoridades. Nuestro deber ciudadano es exigirles, así como les exigimos en el pasado, porque para eso se mantienen de los contribuyentes.  No obstante, es menester también exigirnos a nosotros. ¿No cree? 

De salida 

¿El FAM quiere entregar el Senado?

Ganar perdiendo.- Para nadie es un secreto, que en la cabeza de Miguel Alejandro Alonso Reyes, una idea se mueve coqueta. El ex gobernador de Zacatecas, piensa aprovechar sus influencias y cercanía con Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas, para que el PRI lleve mano en la elección del perfil y encabezar la fórmula al Senado. No es el más competitivo, empero, le apuesta a ganar a través de la derrota. Es decir,  si el Frente Amplio por México (FAM) lo elige, asegura la Primera Minoría y un escaño en el Senado.  MAAR apuesta a que el dirigente priista mueva sus fichas para que él sea el beneficiado, aunque tenga que sacrificar a su compañera de fórmula, que según proyecta el priismo, sería la panista Noemí Luna Ayala.

El vengativo “Alito”.- Y es que, el vengativo de “Alito” ya no piensa en Claudia Anaya como su primera opción para encabezar otra vez la fórmula para la Cámara Alta.  El dirigente nacional del PRI, no le perdona a la zacatecana el reclamo que le hizo por “venderla” en la elección de 2021. El líder del tricolor tiene muy presente aquel Martes de Jaguar de octubre de 2022, cuando su paisana Layda Sansores, exhibió un audio en el que supuestamente acuerda operar por David en conversación con su “amigo” Ricardo Monreal.  No le cayó nada en gracia que la senadora más productiva de su partido, se rebelara y le hiciera un sentido reclamo, en alusión a esos audios. De ahí que prefiera jugar con el personaje más oscuro de la historia reciente de Zacatecas ¿Cómo ve? 

¿Permitirán en agandalle?.-  Es la cuestión.  El negro propósito de los Alejandros, dejaría en el camino no solo a Noemí Luna Ayala, también al perredista que ha construido un camino al Senado. Hablo de Miguel Torres Rosales, quien poco a poco ha ascendido en las preferencias, dejando abajo a otros perfiles como Miguel Varela,  “Fito” Bonilla -quien dicho sea de paso, se ha desentendido de la política-, entre otros. La apuesta a entregarle a Morena en bandeja de plata, los dos escaños en la Cámara Alta, al imponer a un perfil poco competitivo -sus impulsores creen que ya se olvidó que fue artífice de la deuda de Zacatecas- como es Alonso Reyes, debería tildarse como la más artera traición al FAZ. Pues así las cosas. Feliz inicio de semana. 

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