Por Norma Galarza Flores
TELECRACIA.- Nuestro país, se acerca cada vez más a la figuración de un paraíso murfhiano donde todo lo que va mal, corre el peligro inminente de ponerse peor. Tan ilógico como un ingeniero practicando cirugías, así resulta la “moda” de actrices, futbolistas y payasos haciendo leyes. ¿Y que tan lógico suena que nos gobierne un Presidente con más filiación por las actrices de mediana calidad que por los libros? Para confirmar que de plano, México parece más una fantasía de terror de Stephen King, que un país subdesarrollado «normal» ahora la procuración de justicia correrá a cargo de una abogada con un curriculum bastante respetable, peeeero cuyos nexos familiares la colocan como una estrella más del canal de las estrellas.
TELEBASURA.- Ante la evidencia cada vez más notable de que, quien nos gobierna es la telecracia y no cualquier telecracia, un monopolio que tiene años produciendo zombies adictos a la telebasura, lo único que resta pedir es que el airecito de “la Rosa de Guadalupe” (que balconeo aparte, puedo decir que he visto este programa en alguna cita médica y que tuve que resistirlo aún a riesgo de una crisis de vómito) los ilumine y empiecen a legislar y a gobernar en favor de este pueblo cuya resistencia estoica, que ha soportado los peores embates de corrupción, injusticia e impunidad, parece dar visos de estar llegando a su límite.
CARMELITA SALINAS.- La designación de “La Corcholata” alías Carmelita Salinas, una de las “luces” de la época más chafa del cine nacional, cuando las películas de ficheras eran lo más promocionado, como próxima Diputada plurtinominal, causó bastante revuelo en redes sociales al evidenciar que ya no queda nada del priismo serio de antaño. Si bien es cierto, no es la primera actriz que se lanza al ruedo de la política, porque, ya tuvimos una tigresa en una curul y a una reina del danzón, que pasaron sin pena ni gloria por el “prostituido” recinto, Carmelita, amenaza con, por lo menos, ponerle sabor a las sesiones del Congreso, con el lenguaje verdulero que la caracteriza, y que conste no critico, porque yo me sé peores.
ARELI GOMEZ.- Relacionada con el show business, pero también Senadora por el PRI desde el 2012, deja el cargo para convertirse en nuestra flamante Procuradora General de Justicia, y entra en lugar de un Murillo Karam muy “cansado”, Arely, es otra espinita en el zapato de los que quieren ver a la política y más un tema sensible como es el de la procuración de justicia, como asunto serio. La “hermanita” de Leopoldo Gómez actual vicepresidente de noticieros Televisa, se ha deslindado hasta el cansancio de su relación con la empresa de Azcárraga y niega que en su designación haya “conflicto de interés”, pero ya a estas alturas de nuestra realidad, nada es extraño.
¿Y que me dice del «Cuauh» y «Lagrimita? más locura, imposible…
Lo peor, es que la Telecracia ha demostrado que no sabe gobernar así que no veo buenos augurios para los que vivimos en este bello y saqueado país, porque como reza una ley de Murphy: Si hay una posibilidad de que varias cosas vayan mal, todo saldrá mal, o en su defecto aquella que cause mayor prejuicio. Ooops!…