Por Norma Galarza
«No se puede ser y no ser algo al mismo tiempo y bajo el mismo aspecto».
Aristóteles
➡️Traición en el Congreso del Estado
➡️Diputados llamarada de petate
➡️Opositores “Chimoltrufios”
➡️Respaldo tácito de alianza morenista a la Ley estatal del garrote
Traición en el Congreso del Estado .- A los tibios los vomita Dios, reza el adagio popular. Y tibios son diputadas y diputados que pese a respaldar en el discurso a manifestantes el 8M que piden remoción de Rodrigo Reyes Mugüerza, a la hora de votar, se hacen ojo de hormiga. Que la nula gobernanza dé la instrucción de no tocar a su funcionario es de esperarse, pero que en la legislatura se responda con tal sumisión, sorprende. Lo que ocurrió ayer en la LXIV legislatura no es nuevo. Ya se auguraba desde que el pasado 12 de marzo se vació el pleno, luego de que José Luis Figueroa “El Cepillo” presentó un punto de acuerdo para exigir la destitución del secretario de gobierno. Llamó la atención que previo a la graciosa huida de ese día, la iniciativa del diputado independiente, fue respaldada primero que nadie, por las Gabrielas: la del PRI la de Morena. Gabriela Monserrat Basurto Ávila, la candidata priista a diputada por el distrito IV, se adhirió a la iniciativa. Por su parte Gabriela Evangelina Pinedo Morales, solicitó que se votara de urgente y obvia resolución y antes, el día del terrible incidente en Plaza de Armas, hasta acompañó a las agredidas. No obstante, a la hora de la verdad, emprendieron la graciosa huida. Al emitir el sufragio, el martes, solo Zulema Yunuén Santacruz, actualmente perredista, alzó la mano a favor. Ernesto González Romo de Morena se abstuvo y Roxana del Refugio Muñoz González, también del “Movimiento” votó en contra. Desde la sesión que siguió a la represión, fue evidente el desinterés de 16 diputadas y diputados de contrariar al gobierno de David Monreal.
Diputados llamarada de petate.- Respaldar la iniciativa del ahora diputado independiente, es una forma de dejarle claro al Ejecutivo que el derecho a la manifestación es sagrado. Sin embargo, los legisladores dan la espalda a las mujeres ultrajadas de forma salvaje el 8 de marzo. El Congreso estatal extendió su manto para proteger al principal señalado de dar la orden de encuerar (así), arrastrar por el cabello y golpear a adolescentes y reporteras cuando la marcha estaba a punto de acabar. Tras esa fallida sesión del martes pasado, ayer, la LXIV legislatura retomó el que fue el punto siete de la Gaceta Parlamentaria. Casi dos horas después de la cita al pleno, en el primer pase de lista, solo se encontraban 13 legisladores. Número cabalístico que exhibió a 16 que ya desde la sesión anterior tenían toda la intención de generar un vacío. Los ausentes después del cuarto pase de lista emitido por la mesa directiva presidida por Martha Elena Rodriguez Camarillo, confirman las dudas. Ellas y ellos son incapaces de actuar cuando en sus manos está definir asuntos escabrosos contra la nueva gobernanza. Entre los opositores a modo, que se desgañitan en el pleno contra el gobierno de David Monreal, pero a la hora de la verdad son pura llamarada de petate, se encuentran priistas, panistas y perredistas.
Opositores “Chimoltrufios”.- Si algo hemos aprendido de la 64 legislatura, es su maestría para simular. Pueden armar horas de discusión en las que fingen estar en contra del régimen pero cuando se trata de votar, en el legislativo crean compactas orgías partidistas de facto. No es la primera vez, y ya deberíamos estar acostumbrados a la capacidad de diputadas y diputados para convertirse en chimoltrufias de ocasión. Caso emblemático es el de la candidata a la reelección Gabriela Basurto. Ella al igual que su compañero de partido (El PRI) Herminio Briones Oliva hicieron un Harry Houdini ayer a la hora de votar la expulsión de Reyes Mugùerza. Otra opositora de papel es Karla Dejanira Valdés Espinosa del PAN. Suele enunciar sendos discursos contra el Morenismo y aliados en el gobierno estatal, pero cuando se trata de actuar, demuestra que su diatriba es fuego fatuo. Enrique Laviada es un caso especial, porque presume con estridencia sus desacuerdos con la administración actual, pero cuando se trata de tocarla, su filiación Ricardista lo traiciona. Es claro, que aunque pataleé ocasionalmente, es opositor de histrión. José Juan Mendoza es un caso similar. El fósil del PRD, merece premio especial porque en este su segundo periodo, decidió no meterse en problemas y nadar de muertito. Así la falacia de los que se dicen anti 4T en Zacatecas.
Respaldo tácito de alianza morenista a la Ley estatal del garrote – Si los supuestos adversarios del «gobierno de la transformación» actúan con esa tersura a la hora de condenar al estado represor, nada se esperaba de los de casa. La alianza oficial que llegó al poder promoviendo la “izquierda” y por el dedazo de Vero Díaz, David o Ricardo Monreal, arropó (como se esperaba) a sus patrones. De ahí que no hubo sorpresas de las verdes (porque son del Verde Ecologista, no piense que por su calidad de jóvenes “juniors” del poder), Georgia Fernanda Miranda ni de Susana Andrea Barragán. Ni qué decir de los morenistas Gabriela Pinedo, Roxana Muñoz, Esther Oralia Félix Estrada (la suplente de Violeta Cerrillo), Armando Delgadillo, Imelda Mauricio, Maribel Galván, Ernesto González Romo, Nieves Medellín y Armando Juárez. Todos cumplieron como lo que son: instrumentos de sus verdaderos jefes. No, no se ilusione, a quien obedecen no es al pueblo. No los motivó ni siquiera la multitudinaria marcha que otra vez ayer, miles de zacatecanos (hombres y mujeres) protagonizaron para repudiar la represión. En fin, la mesa directiva volvió a citarlos para el día de hoy a las 10 de la mañana, pero, dada la coyuntura, lo más seguro es que vuelvan a hacer vacío. Y así les pagamos más de 4 mil pesos por día. Así las cosas. El colmo es que varios de la lista quieren ser reelectos. Ojalá que el electorado los diezme. Hasta el lunes
